Explorando la violencia entre niños y adolescentes
En las últimas semanas hemos visto noticias devastadoras sobre el efecto de la violencia, eventos menos aislados y en donde se involucran jóvenes cada vez más pequeños. La violencia es un problema grave que tiene efectos duraderos en la vida de quienes la ejercen y quienes la padecen, por ello no podemos acostumbrarnos a vivir en un entorno que amenaza nuestro bienestar.
¿Cómo se ve la violencia?
Primero, no tiene que ver solo con golpes, incluye acoso escolar, intimidación, abuso sexual, violencia verbal o física, incluso el hostigamiento en línea califica; lamentablemente es común que la familia no note cuando hay una víctima o un perpetrador en casa.
INDICADORES DE QUE UN NIÑO O ADOLESCENTE ES VÍCTIMA DE VIOLENCIA:
- Lesiones inexplicables
- Pérdida o rotura de ropa, libros, dispositivos electrónicos, etc.
- Dolores de cabeza o estómago frecuentes, sensación de malestar.
- Cambios en los hábitos alimentarios, como saltarse horarios de comidas o atracarse.
- Dificultad para conciliar el sueño o pesadillas frecuentes.
- Calificaciones bajas, pérdida de interés en las tareas escolares o no querer ir al colegio.
- Pérdida repentina de amigos o deseo de evitar situaciones sociales.
- Sentimientos de impotencia o disminución de la autoestima
- Comportamiento autodestructivo como escaparse del hogar, autoinfligirse heridas o hablar de suicidio
INDICADORES DE QUE UN NIÑO O ADOLESCENTE EJERCE LA VIOLENCIA:
- Se involucran en agresiones físicas o verbales.
- Tienen amigos que acosan a otros.
- Son cada vez más agresivos.
- Tienen problemas de disciplina en el colegio.
- No pueden explicar cómo obtuvieron dinero adicional o pertenencias nuevas.
- Culpan a otros de sus problemas.
- No asumen responsabilidad por sus actos.
- Son competitivos y se preocupan por su reputación.
Es importante tener en cuenta que estas señales no son decisivas, hay que ahondar para tomar las medidas necesarias.
Foto: cottonbro studio para Pexels |
Causas
La UNICEF ha identificado factores sociales, culturales, económicos y psicológicos que provocan la violencia entre las poblaciones menores de edad:
- Exposición en la familia, en sus comunidades o medios de comunicación.
- Pobreza y expulsión social.
- Discriminación e intolerancia por género, orientación sexual, raza, religión o discapacidad.
- Falta de oportunidades para el desarrollo y la participación en actividades sociales y comunitarias.
- Pocas habilidades emocionales y sociales, como la empatía, la resolución pacífica de conflictos y la comunicación efectiva.
Prevención
Estar informados es clave:
- Fomenta la comunicación abierta y el diálogo con los hijos.
- Enseña habilidades para resolver conflictos y manejar emociones.
- Promueve el respeto y la empatía hacia los demás.
- Establece límites claros y consecuencias adecuadas para el mal comportamiento.
- Buscar ayuda de profesionales capacitados si es necesario.
Solo en los hospitales de la Ciudad de México durante 2021 se atendieron a 463 personas de 0 a 17 años por violencia familiar, 258 por violencia sexual y 602 por violencia física; muchos otros quedaron sin registro y probablemente sin el apoyo psicológico y emocional que requerían. Prevenir está en nuestras manos.
Warning Signs for Bullying. StopBullying.gov
Violencia contra infancia y adolescencia en Ciudad de México. Procuraduría Federal de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes.
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