LOS SÍ Y NO DE LA AMISTAD

La amistad es un elemento fundamental en el desarrollo de todos los niños, estudios han demostrado que, los que tienen amigos, tienen menos probabilidad de sufrir depresión, ansiedad, hiperactividad, falta de atención.  

Tener buenos amigos les ayuda a amplificar sus habilidades sociales y a mejorar su autoestima, tanta es su influencia que suelen convertirse en una fuente de apoyo emocional, por lo que es prioritario ayudarlos durante la infancia a identificar cuándo se trata de una amistad sana y cuándo no lo es. 

En una amistad saludable:

• Todas las partes se tratan como iguales. 
• Hay honestidad, confianza y respeto por los límites de los demás. 
• Se celebran los éxitos de todos. 
• No se ejerce la presión social. 

Foto de Pixabay para Pexels

Por el contrario, como padres es crucial detectar los signos de las amistades poco saludables, especialmente en la adolescencia, ojo con lo siguiente: 

• Percibir que la relación es unilateral, por ejemplo cuando solo tu hijo es el que proporciona apoyo, es el único que hace esfuerzos por comunicarse o iniciar planes. 

• Notas comportamientos poco amables como bromas muy pesadas, burlas, menosprecio, ridiculizar o explotar la buena voluntad de los demás. Si tienes dudas, pon atención a cómo se porta tu hijo al estar cerca de este amigo. 

• Si parece que alrededor de esta amistad frecuentemente hay peleas, celos, envidia, manipulación, intentos de monopolizar su atención o al contrario, hay exclusión, etc.

• Un cambio en la autoestima o confianza de tu hijo puede ser una advertencia temprana de que algo raro está sucediendo en su círculo social, presta atención. 

• De pronto hay un constante desafío a la autoridad, independientemente a los cambios que suelen haber en la adolescencia. 

• Si te sientes incómoda con esa amistad, confía en el instinto de mamá y explora esos sentimientos. 

Si no te gusta una amistad, ¿qué hacer?

Ante la imposibilidad de que elijas a los amigos de tus hijos, te damos un par de recomendaciones: Observa y escucha mucho, pregunta más de lo que hablas y no prohíbas tajantemente una amistad. 

APRENDE A PLANTAR LA SEMILLA DE LA DUDA

 

Con niños de 12 años o menos puedes ser más directa en tus acercamientos:

La actitud de [nombre del amigo] me parece un tanto [nombra el comportamiento]. [ejemplifica con sus propias acciones] Eso no me gusta de él. Ayúdame a entender qué es lo a ti te agrada. 

Después de los 12 el planteamiento de tu intervención puede ser similar, pero más sutil, aunque no logres tener una respuesta clara al primer intento la duda va a estar ahí, es normal que lleve tiempo. Eso sí, cuando veas el resultado esperado no lo celebres.

No me gusta [el comportamiento], por eso no me gusta que frecuentes a [nombre del amigo] porque [consecuencia de esa forma de comportarse].

Si quieres que se dé cuenta de que lo están poniendo en una situación que no es correcta o que lo pone en riesgo, pregúntale: ¿Alguna vez le harías eso a alguien?. Es muy probable que después de esto vaya poniendo distancia.

¿Cómo poner distancia?

• Nuevos círculos y paciencia es una buena combinación, trata de involucrarlo en nuevas actividades que le permitan socializar con otros chicos y dale tiempo.  

• Evita las críticas repetitivas a sus amigos, especialmente en la adolescencia porque por impulso van a tratar de defenderlos. 

• Sé más estricto con la estructura de las rutinas para evitar que frecuente a las personas que no son sanas. 

• Si opta por mentir ejerce las consecuencias que hayan establecido. 

• Pon límites en la cantidad de tiempo que pasan con los supuestos amigos. 

Siempre la mejor recomendación será mantener abierta la comunicación para que tengan clarísimo que no importa lo que suceda, siempre serás el lugar seguro a donde puedan recurrir. 

FUENTE: Frenemy or Friend? How to Spot the Signs of Unhealthy Friendship in Kids. Sherri Gordon. Verywell Family. Marzo 2022. 

Six Ways to Help a Child Who Has a Toxic Friend. Erin Leonard. Phycology Today. Enero 2020. Does Your Child Have Toxic Friends? How to Deal with the Wrong Crowd. James Lehman. Empowering Parents.