El arte de la negociación con pre y adolescentes
Durante la negociación, se adquieren las habilidades para la toma de decisiones y el entendimiento de consecuencias, beneficia la comunicación y facilita el entendimiento del compromiso en los chicos. Mejora la relación con las figuras de autoridad y es una buena práctica para su vida adulta.
Adentrándonos en el tema, negociar consiste en comunicarse bien y encontrar soluciones que padres e hijos puedan aceptar. Puede parecer que es un arreglo vertical, cuando lo cierto es que el adulto eres tú, por lo tanto, tienes que ejercer tu autoridad para mantener límites -pocos- claros y ser específico sobre los no negociables.
El éxito está en la preparación
Como lo dijimos antes, es primordial que tengas claro cuáles son las reglas que no se negocian, éstas tendrán que ver con la seguridad, la integridad, la salud. Por ejemplo, la hora de llegada es a tal hora, no se bebe alcohol hasta determinada edad, no viajas con tus amigos sin adultos hasta que cumplas equis años, en ninguna circunstancia está permitido usar drogas, etc.
Ya que tienes clarísimos los no negociables hay situaciones que puedes predecir, como las fiestas, vacaciones, las primeras relaciones amorosas, etc. Prepárate, discute el tema con tu pareja y juntos decidan.
En caso de que te tomen por sorpresa puedes fijar una hora para tocar el tema, solo que sea pronto y que puedas cumplir, porque así comunicas que puedes cumplir con tu palabra y das confianza.
Foto de Savvas Stavrinos |
· Escucha activamente sin interrumpir.
· Usa un tono amable y firme, sé cálido para evitar conflicto.
· Expresa tus puntos de vista y pide lo mismo. Por ejemplo, en una salida dile que te encanta que se divierta y pase tiempo con sus amigos, pero que te preocupa su seguridad y que el acuerdo tiene como finalidad mantenerlo a salvo.
· Si la conversación no está llegando a ningún lado manifiéstalo y pon otro horario para regresar al tema.
· En situaciones que no estén en tus no negociables da opciones, no hay forma de que pinte su recámara de negro, pero quizá pueda hacerlo en una sola pared o elegir otro color o tal vez algunos muebles.
· Al llegar al acuerdo haz un pequeño resumen con las consecuencias de no cumplirlo.
· Termina con un comentario positivo, incluso si no fue un convenio perfecto. Agradécele por hablarlo contigo, transmite la confianza que te da.
Estrategias
La relación familiar no es precisamente idéntica a una de negocios, pero hay algunas guías que pueden ayudarte:
- Recuerda que es una relación a largo plazo. Hay argumentos e ideas que no quieres llevar a la mesa, piensa que puedes herir aún sin quererlo. Aléjate cuando la situación se pone muy tensa, no vale la pena imponer.
- Profundiza en el fondo. Lejos de interpretar una situación encuentra la forma de adentrarte en una lectura más profunda de la situación, pregunta, explora, encuentra los verdaderos intereses.
- Identifica los sentimientos y las emociones implicadas. Pregunta sin ser amenazante, las actitudes de la pre y adolescencia responden a un cúmulo de emociones que ni ellos mismos tienen claras, tu papel es identificar desde dónde están hablando para poder ser empático y tratar de entender mejor.
No está de más que dimensiones las prioridades de tu adolescente, puede que no sean justificables, pero sí tienen un razonamiento que responde a cambios físicos, alteraciones químicas y hormonales propias del desarrollo. Por ejemplo, una fiesta es más que horas de entretenimiento, tiene que ver con sentimientos de pertenencia, procesos de sociabilidad, la necesidad de reconocerse entre pares.
Finalmente, uno de los grandes beneficios de la negociación es que les das la oportunidad de demostrar que son responsables, ganan confianza y se enfrentan al compromiso.
Fuente: Negotiating with pre-teens and teenagers. Raising children. Septiembre 2021.
Negotiation Strategies for Families. Marty Latz. The Arizona Republic. Enero 2011.
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